Ser puertorriqueño no es, emocionalmente, fácil. Todos los días me levanto y veo alguien (o alguna entidad/institución) que se dedica a destruir mi nación o lo que algun@s llaman «nuestra fantasía nacional».
Constantemente leo cómo Puerto Rico no es nada sin los Estados Unidos. Cómo los puertorriqueños somos “americanos” (y no en el buen sentido continental, sino en el más burdo sentido colonial) y cómo nuestra nación es Estados Unidos. Lo veo cuando periódicos como el San Juan Star dividen sus noticias entre “Local” (lo de Puerto Rico) y “Nacional” (lo de Estados Unidos). Lo veo en los comentarios que hacen los redneck boricuas en cualquier foro cibernético en que participan…En fin, lo veo por todas partes.
Sin embargo, existen dos espacios internacionales en los que existimos por nuestra propia cuenta y bajo nuestra propia bandera: los deportes y el Miss Universe (por más patético que nos parezca). Y es quizás esta realidad la que me lleva a vivir mi nación imaginada en estos eventos. Cada vez que ocurre un evento deportivo internacional y veo la bandera de mi país desplegada en el pecho de l@s deportistas y el PUR escrito en las pantallas televisivas me siento, al menos momentáneamente, como parte del resto del mundo. Siento que ahí sí que nosotr@s nos valemos por nuestros propios esfuerzos, por nuestros propios méritos y ningún bocabajo nos lo puede quitar. Y por esos breves instantes, soy feliz. Mi «fantasía nacional» se concretiza.
Sé que no soy el único. Pregúntenle a Fiel a la Vega. Pero mi «fantasía nacional», a veces, termina de la misma forma que mi realidad colonial: en la desaparición, en la derrota o en la irrelevancia. Todos los resultados duelen de la misma forma. Cualquiera me puede decir que “eso no es na’”, “eso no es importante” o que “eso es trivial”, pero para mí no lo es. No lo puede ser.
Y siendo esto así, sufro todas nuestras derrotas. Pero creo que no había sufrido ninguna más que la derrota de Miguel Cotto este sábado pasado. Nadie me quitará de la mente la imagen de Cotto doblando sus rodillas voluntariamente para evitar más castigo. Y que no quede duda, esa fue la decisión deportiva más inteligente y correcta que pudo haber hecho. Eso no lo cuestiono. Pero a nivel emocional fue un golpe en el alma. No habiéndome repuesto del chiste cruel del destino de dejar que Puerto Rico pasara de la fase eliminatoria en el pre-olímpico para que simplemente muriera en la orilla, tuve que presenciar al único atleta puertorriqueño que muchas personas en el mundo consideraban como uno de los mejores, sino el mejor, doblegándose ante el ataque de un peleador más alto y fuerte que él. ¡Qué símbolo tan desgarrador! En términos puramente emocionales (vuelvo y repito que creo que fue la decisión boxística inteligente) creo que hubiera preferido verlo caer por un puño que haberlo visto rendirse voluntariamente. No me malinterpreten; esto no tiene nada que ver con “hombría” ni ninguno de esos valores machísticos (no es un error, quise decirlo así) que tanto se exaltan en los deportes. Tiene que ver con todas las instancias en que nosotr@s, como puertorriqueñ@s, nos rendimos ante oponentes más grandes y fuertes (en todos los ámbitos). Ese sábado, mi «fantasía nacional» recibió un golpe bien severo.
No obstante, a la vez, tengo que decir que estoy más orgulloso de Miguel Cotto ahora que antes. En esa pelea demostró que tiene unas habilidades de boxeo superiores a muchísimos boxeadores contemporáneos. Su versatilidad, su técnica, su inteligencia y su talento quedaron ampliamente demostrados. Simplemente su oponente fue más fuerte ese día. De igual forma, su anuncio un día después de la pelea “Este no es el fin” (ENDI) me deja claro que aunque se le perdió un capítulo, no se va a entregar al bloqueo mental y continuará escribiendo uno de los libros más emocionantes del deporte en la nación puertorriqueña. Finalmente, el haber bajado su rodilla en este combate se puede leer de otra forma, de una forma mucho más positiva y esperanzadora. Recibir castigo innecesario le podía haber tronchado la carrera a Miguel Cotto; sin embargo, inteligentemente reconoció que esa no era su batalla a ganar y que era mejor guardarse para todas las otras glorias reales que todavía le puede dar a nuestra nación. ¡Adelante Miguel!
Sangrando por la herida 
Te sorprendera saber que yo no era fanatica de Cotto no hace tantisimo. El boxeo siempre me ha parecido un castigo innecesario al cuerpo … pero desde que vi la pelea anterior de el, con el muchacho de The Contender, me converti en fiel admiradora de Cotto. Y como tu bien dices, es una de las pocas instancias en las que existimos mas alla de la sombra del «gran pais del norte.» Y aunque siento haberte dicho como veia en la mirada de Cotto un no se que, que me decia que esta pelea iba a ser dificil y que la posibilidad de perder era real … en esos ultimos momentos del round 11 Cotto salio adelante como un caballero. No se dejo tirar al piso como un Tito cualquiera, dijo, no tengo porque aguantar esto, el castigo es suficiente, vamos a reconocer esto por lo que es y salir con la frente en alto … y ese es el claro ejemplo que deberiamos seguir nosotros como puertorros y no dejar que nos tiren al piso y hagan con nosotros lo que les da la gana (hablando de la relacion con los US). Ya es hora de poner los pantalones en su sitio y salir ante el ring mundial y dejar de mangonearnos … por eso, necesitamos gente como tu y como Cotto, que nos den orgullo, pero nos hagan pensar tambien. Y ya veras, que de esta Cotto hace lo que debe hacer, aprende su leccion y vuelve al ring mas poderoso que antes. Viva Cotto y viva mi PATRIA libre del yugo extranjero (y del local por las mentes colonizadas).
un buen general sabe cuando rendirse o echar para atras… solo el moron ataca continuamente cuando esta perdido. o sea, a veces uno gana cuando sabe cuando dejar algo perder… para despues tener otro dia de pelea.
Concuerdo con ambos. De hecho, una de las razones que siempre he tenido mas esperanzas en Cotto que las que tuve en Tito es, precisamente, por lo inteligente que es. Por eso, aunque esa derrota es dolorosa, estoy convencido que hizo lo correcto. Demostro mucha mas sabiduria que la que ha demostrado Trinidad en toda su carrera.
Gracias por comentar!
Pocas veces he leído de alguien expresar su sentimiento patrio de esta forma. Me hubiera gustado haberlo escrito yo. Quizás le hubiera añadido que también existen los artistas como el Gran Combo, Ricky Martin, Benicio del Toro, por mencionar algunos que cada vez que los mencionan la mayoría de las veces es para destacar sus contribuciones a causas nobles alrededor del mundo. Pero es tu voz, no la mía y con todo lo que escribiste estoy de acuerdo. Solo pensar en la semana en que ganó Tito y Denisse Qiñones, habían mas puertorriqueños esa semana que personas en el resto del mundo. Son esas cosas que nos unen las que deberíamos realzar mas. En cuanto al boxeo pienso como Mariena que es un deporte machista derivado de nuestro pasado troglodita. Pero para los gustos los colores. Saludos
Ora, gracias por el cumplido! La verdad es que fue una de esas cosas que uno escribe con las emociones en las manos.
Y estoy de acuerdo en que hay muchas otras personas que le traen glorias a Puerto Rico… y en cosas mas «importantes» que los deportes. Pero los deportes y el Miss Universe tienen un elemento que le falta a las esferas en las que se desempen~an estas otras personas: la competencia. Puerto Rico, como colectivo nacional, tiene una autoestima muy baja y «ganar» competencias siempre estimula algun sentido de orgullo. Es simbolo, ademas, de que estamos en las mismas ligas… en el mismo nivel. Suena superficial, pero cuando uno vive en una condicion colonial, cualquier victoria importa.
Y, finalmente, en cuanto al boxeo estoy de acuerdo contigo. Pero es que en general los deportes son sublimaciones de las agresiones militares. En casi todos los deportes de grupo, por ejemplo, hay dos formaciones belicas que se agreden y se defienden mutuamente. En otros deportes individuales como la esgrima, el judo, la lucha olimpica, la metafora desaparece y se convierte en agresion real. La unica diferencia es que en esos deportes el contacto fisico no es tan brutal como en el boxeo. Pero todos tienen un germen de violencia. Quiza es eso lo que nos pasa… como no tenemos una historia heroica propia (glorias ganadas para el imperio no cuentan en este caso), ni grandes hazan~as revolucionarias, sublimamos nuestros deseos belicos en estos espectaculos. Quien sabe.
Gracias por comentar!
De acuerdo contigo en tu apreciación de la estrategia de Cotto. En lo del dolor nacional también, claro que sí y qué curioso, sentir el dolor patrio de un joven, alienta la esperanza y aminora la pesadumbre. Lo de Miss Universo es cosa aparte, con lo desacreditado que está ese certamen ya sabemos que una cosa así [como concepto] nunca debió existir. Lo que me aterra de todo esto y siempre me ha torturado es lo bien que se nos enseñó a cifrar nuestra existencia en esas competencias y qué buena estrategia resultó para que descuidáramos atender la verdadera esencia de la nacionalidad y la patria. Esas fueron nuestras cuentas de colores. La interpretación oficial se envolvió en esa nacionalidad light y así el gran pueblo aceptaba y conciliaba las más escandalosas contradicciones. Claro, tampoco hay que olvidar que ese mismo fenómeno trajo en sí la cierta resistencia que nos mantiene como nación, hoy todavía a pesar de los Santinis y Fortuños de la vida. Lo bueno es que haya gente joven como ustedes que, con nuevas herramientas, estudian el gran problema de nuestra definición.
Si, en efecto esto ha sido nuestra version del «Baile, botella y baraja». Definitivamente el nacionalismo en Puerto Rico es ese nacionalismo light del que hablas (nacionalismo cultural como lo llama Jorge Duany) y eso sirvio para extirpar el nacionalismo politico revolucionario del imaginario colectivo puertorriquen~o. Ahora… tengo que pensar que Antonio Gramsci tiene algo de razon y que la cultura es uno de esos campos en donde se resiste la hegemonia. Por eso me importan tanto estos eventos, pq creo que aunque la gente no se de cuenta, es en estos momentos en los que hay algun asomo de resistencia puertorriquen~a a la colonizacion sistematica. Y en estos momentos, creo, se da mas fuerte que en otras luchas verdaderamente politicas. No podemos olvidarnos, por ejemplo, de aquel magno recibimiento que se le dio a Tito cuando le gano a De LaHoya y las manifestaciones abiertamente politicas que se dieron alli… como aquel momento en que los presentes se opusieron a que hubiera una bandera estadounidense en el podio de Tito. Y eso no fue un «pun~adito» de fupistas… eso fue una reaccion general en ese momento. Sin embargo, cuando una lucha abiertamente politica aflora, el pueblo se divide, se desune por colores, ideologias, etc.
Efectivamente este no es el mejor de los mundos posibles para el nacionalismo boricua, pero es lo unico que nos han dejado. Hay que usar lo que tenemos.
Gracias por comentar!
Tengo que concordar con JC y con Borincano en que hay mas manifestaciones del orgullo puertorriqueno que lo de Miss Universe. Lo de Cotto es aparte. Aunque reconozco lo barbaro de este deporte, y quiza lo ancestral (recuerdense los gladiadores romanos), me parece que es un campo en el que los puertorriquenos nos hemos destacado. Cotto es solo uno (y de los buenos) de grandes maestros del arte de «Fistiana», porque hemos tenido muchos (Wilfredo Gomez, Benitez, Espada, Sixto Escobar, El Salsero Escalera, Esteban de Jesus [Q.E.P.D.], Chapo Rosario [IDEM]. Y lo que dices de Cotto lo comparto 100%. Demostro no solo calidad (porque estaba ganando la pelea), sino sabiduria boxistica.
Te felicito por ese comentario patriotico. POcas veces veo a gente como tu, joven, expresarse tan emocionadamente de su pais. A nosotros nos han fastidiado la autoestima haciendonos creer la patraña de que somos estadounidenses (como si ellos no nos odiaran), y de que somos afortunadisimos por esta relacion. Yo tambien sufro cada vez que alguno de mis patriotas sufre un reves como el de Cotto. Pero estoy seguro de que en una revancha, el boricua le descifra el estilo y le gana. Dios te bendiga!
Sí, en efecto creo en el valor de la resistencia cultural. Y como te decía, creo que eso aflora naturalmente y es la parte buena o la venganza, más bien, [justicia poética, también podríamos llamarla] que se ejercita espontáneamente contra quienes se han prestado para negociar todo lo nuestro a costa de nosotr@s mism@s. Por eso es que la realidad puertorriqueña es tan compleja y tan difícil de reducir.
P.S. Queremos a Tito, Tito, Tito. Su inteligencia es diferente a la de Cotto, dito!
Creo que quiza debo hacer una aclaracion en cuanto a mi oracion: «Sin embargo, existen dos espacios internacionales en los que existimos por nuestra propia cuenta y bajo nuestra propia bandera: los deportes y el Miss Universe (por más patético que nos parezca).»
1) Con esto no quise decir que no existen otras manifestaciones de nacionalismo puertorriqueño. Solo quise decir que en estos dos campos se representa directamente al Pais. Los cantantes, los actores, los intelectuales, los escritores representan a Puerto Rico de otra forma (igualmente valiosa), pero no necesariamente en ambitos competitivos. En los deportes y en el Miss Universe, Puerto Rico se representa en competencia directa con otros paises incluyendo al imperio.
2) En cuanto a Miss Universe… Creo que aunque nos parezca patetico (no digo que no), hay que aceptar que esto es un evento que crea espectativas en Puerto Rico. El hecho de que Puerto Rico sea el segundo pais (empatado con Venezuela) que mas reinas tenga es motivo de orgullo para muchas personas. Y en este evento, nuevamente, nos separamos de los Estados Unidos y competimos de tu a tu. Y en muchas ocasiones podemos ganar. Analizar el evento propiamente (y sus connotaciones sexistas, esclavistas y modernas) seria una entrada aparte que no me interesa hacer puesto que creo que muchisimas personas ya han tocado ese tema. En este caso yo solo lo miro en funcion a lo que hace en terminos de la resistencia cultural.
En cuanto a Cotto, creo que una derrota, al fin y al cabo, no es la gran cosa. Si el se repone y vuelve a la carga, eso sera una nota al pie de la pagina en su carrera. Ni siquiera aquellos que se consideran como «los mejores de todos los tiempos» se retiraron invictos (bueno, excepto por Marciano). Asi que estoy de acuerdo contigo profesor, en la proxima le voy al mio tambien.
Y Tito… mas bien la inteligencia del manejador es la que deja mucho que desear.
Mi antídoto para soportar la colonia es visualizarme que vivo en la independencia. Cada acto o acción que llevo a cabo la realizo teniendo esto como principio. Para resistir con que no ganen es suficiente…..
Me interesa tu «approach», podrias describirmelo un poco mas? Con ejemplos de tu dia a dia?
Gracias!
Luego de leer el escrito y comentarios tan amenos e inteligentes, solo me resta decir, eke lekua ( eso es mi imterpretacion de «two thums up»). Creo que todos coincidimos, celebramos nuestras victoria, pero tambien sabemos resistir las derrotas de pie y de frente.
Si es verdad lo que dicen de que las derrotas y los tropezones en el camino solo hacen a uno mas fuerte, pues de este an~o salimos hechos unas bestias! En el Primera Hora salio un reportaje que se llama algo asi como «Nefasto 2008» y recuenta todas las derrotas deportivas que hemos tenido hasta ahora jejeje. Ta fuerteeee! Pero bueno, pa’ lante que siempre hay otro evento!
Gracias compan~ero por comentar!